lunes, 25 de mayo de 2015

MI JORNADA DEL VIERNES


-¡Oh no! ¡Qué horror!- dijo Salva aterrorizado.

Seis horas antes, estaban en el autobús tranquilos hablando y cantando entre ellos. Cuando llegaron a Córdoba vieron la Mezquita. Se llevaros mucho tiempo allí viéndola. Edu, que por cierto, le encantaba la Mezquita, no paraba de decir que sentía que algo malo iba a pasar. Salieron de la Mezquita, y se fueron a comer y les dejaron tiempo libre.
Después de la visita a Córdoba volvieron al autobús a las 6. Pero justo antes de salir, Antonio se dio cuenta de que Edu faltaba y fueron a buscarlo pero nada, no lo encontraban por ningún lado. Una hora más tarde, a don Rafael le llegó una llamada de un número que él no conocía. Eran unos secuestradores que habían secuestrado a Edu.
-¡Oh no! ¡Qué horror!- dijo Salva aterrorizado.
Tardaron más de 2 horas en poder averiguar donde se encontraba Edu y eso gracias a la policía. Eran ya las ocho y media de la noche cuando fueron al lugar indicado por donde la policía dijo que estaba Edu. Allí lo vieron: estaba asustado y con las manos y las piernas temblando y amarradas a la pata de una silla, y con la boca tapada. La policía detuvo a los secuestradores que eran dos jugadores del Córdoba. Pero la gran noticia fue que Edu estaba sano y salvo. Fue una jornada muy peligrosa y terrorífica la que vivió Edu. Aquella tarde no se le olvidará más nunca.

1 comentario: